Para crear el estilo loft, ayuda contar con una obra limpia; es decir, que las columnas de la edificación estén a la vista sin mayores revestimientos y que también se puedan divisar (aunque sea veladamente) las tuberías y conductos de los servicios básicos.
A muchos, les cautiva ahora aquello que en los años 50, en la gran manzana, era una solución habitacional alternativa. Por su bajo coste y, no precisamente, por ser el lugar de sus sueños donde vivir.
Otra manera fantástica de aprovechar al máximo el espacio de la cocina es decir adiós al tabique que divide esta estancia con el salón, y crear un espacio amplio y diáfano.
Claro que siempre tienes la opción de decorar el palet a tu gusto y adaptarlo a la decoración general del jardín o la terraza en la que vayas a instalarlo. Una buena idea si quieres dar amplitud y luminosidad al espacio es pintarlo de color blanco y combinarlo con el verde como homenaje a la naturaleza.
Para la decoración, se suelen preferir materiales rústicos que no luzcan muy refinados, para que no contrasten con las terminaciones de obra limpia presentes. Las paredes de ladrillos descoloridos y con apariencia desgastada van muy bien para lograr un ambiente tipo loft.
Si te estás preguntando cómo decorar una cocina pequeña con estilo y buen gusto, aquí van algunos tips que seguro que te resultan de gran ayuda. Color: el color es uno de los aspectos más importantes a la hora de decorar este tipo de cocinas. Teniendo en cuenta que el espacio es reducido, lo mejor es apostar por el blanco ya que potencia la luminosidad natural y, además, amplía el espacio.
Si por ejemplo quieres decorar una pared, puedes recortar varias fotos que te gusten y crear con ellas una estrella o un corazón. O puedes reutilizar las cajas de fruta de madera colocándolas como estanterías en el salón. En función de tus propios gustos, así como de la decoración del salón, podrás escoger aquellos elementos de decoración que más te gusten y hacerlos tú mismo en casa.
La iluminación es clave en la decoración de baños pequeños. Se trata de escoger aquellos puntos estratégicos para iluminar las diferentes zonas de la estancia: ducha, lavabo… Los ojos de buey son una opción extraordinaria ya que son muy ligeros y aportan muchísima luz.